La verdadera amistad es como una planta que necesita cuidados diarios para crecer fuerte y sana. Requiere pasar tiempo juntos, conocer a la otra persona, apoyar en todo momento, confiar mutuamente y dialogar transparentemente. ¿Es posible ser amigo de Dios?

Abraham fue amigo de Dios

Pero tú, Israel, siervo mío eres; tú, Jacob, a quien yo escogí, descendencia de Abraham mi amigo.

Isaías 41:8 (RVR 1960)

En el antiguo testamento a la única persona que Dios llama «mi amigo» es  a Abraham. ¿Por qué fue llamado por Dios «mi amigo»? En la Biblia encontramos 2 cualidades de Abraham para que su amistad con Dios sea especial.

Creyó en Dios

Esta hermosa amistad empezó gracias a la fe de Abraham. Por esa razón, la Biblia lo llama “el padre de todos los que tienen fe” (Romanos. 4:11). De esta forma, Abraham decidió creer y confiar en Dios, para tener una amistad inquebrantable.

Y se cumplió la Escritura que dice: Abraham creyó a Dios, y le fue contado por justicia, y fue llamado amigo de Dios.

Santiago 2:23 (RVR 1960)

Obedeció a Dios

Dios se le apareció a Abraham cuando tenía setenta y cinco años. Allí recibió instrucciones y el llamado para su ministerio. La Biblia dice que Abraham obedeció a Dios después de escuchar las instrucciones que había recibido e inmediatamente emprendió el viaje al lugar que Dios le indicó.

Por la fe Abraham, siendo llamado, obedeció para salir al lugar que había de recibir como herencia; y salió sin saber a dónde iba.

Hebreos 11:8 (RVR 1960)

¿Es posible ser amigo de Dios?

En Juan 15:14 Jesús dijo: “Vosotros sois mis amigos si hacéis lo que yo os mando” Sin duda alguna, es posible ser amigo de Dios, pero para eso debemos creer y obedecer, así como lo hizo Abraham. ¿Crees en Dios? ¿Obedeces cuando Él te pide que hagas algo?

Hay quienes parecen amigos, pero se destruyen unos a otros; el amigo verdadero se mantiene más leal que un hermano.

Proverbios 18:24 (NTV)

CVCLAVOZ.