El miedo; ese silencioso enemigo que día tras día te persigue, con el único fin de hacerte dudar, evitar que sigas lo que quieres, tratando de dominarte para que de una manera u otra, no puedas lograr lo que Dios ya tiene para ti.

Sentir miedo es normal, es parte de la vida. El problema inicia, justamente, cuando le haces un espacio en tu vida.

Dice Salmos 27:1 “Jehová es mi luz y mi salvación; ¿de quién temeré? Jehová es la fortaleza de mi vida; ¿de quién he de atemorizarme?”

Puede ser que estés pasando por un mal momento, quizás sientas que no puedes más, entonces te invade el miedo. Recuerda que Dios es fiel! El controla todo en tu vida. Él sabe por lo que estás pasando y cómo te sientes. Pero también sabe, que al terminar esta batalla, serás más fuerte.

Así que al levantarte cada día, deposita toda tu confianza en Dios. Porque, Quién o qué podrá alejarte de su amor? Nada en lo absoluto!

Todo pasará. En la vida estos períodos son normales, solo no permitas que el enemigo use el miedo para amedrentarte y hacerte dudar del poder de Dios y de su propósito contigo.

Vive tranquilo/a, aunque las circunstancias sean adversas, recuerda que Dios es fiel.

Escrito por Jisell Flete