Dios es nuestro amparo y fortaleza, nuestro pronto auxilio en las tribulaciones – Salmo 46:1 (RVR)
¿Cuántas veces hemos puesto a nuestros hijos en sus camas para que luego corran a nuestra habitación durante alguna tormenta? Cuando están en nuestros brazos se duermen de nuevo. Los niños buscan refugio, un lugar donde saben que estarán seguros.
Como niños asustados durante una tormenta, nos asustamos y sufrimos cuando nos encontramos con las tormentas y pruebas de la vida. Pero también tenemos un lugar seguro, un refugio, en los brazos poderosos de nuestro Dios.
En la lectura de hoy, Jesús y sus discípulos estaban en un barco cuando «se levantó una gran tempestad de viento». Los discípulos pensaron que iban a morir, pero Jesús calmó la tormenta. Jesús tiene el mismo poder para calmar nuestras tormentas y ofrecernos refugio en sus amorosos brazos.
Pensamiento para el día: [Pq]En las tormentas de la vida, estamos seguros en los brazos del Señor.[/Pq]
Oración: Señor, ayúdanos a volver a ti para calmar nuestros temores. Amén.
Sra. Nelly Reina (Córdoba, Argentina) / El Aposento Alto
Robert Lora
Noticias relacionadas
¡Suscríbete a nuestro Canal!
Suscríbete ahora
* Recibirá las últimas noticias y actualizaciones sobre tus ministerios favoritos!