NUEVA YORK. El local de la Iglesia Cristiana Hispana que se congregaba en el edificio 1646 de la Avenida Park y la Calle 116 en Harlem, uno de los colapsados el miércoles por la explosión, quedó totalmente destruida.
Sólo ruinas de ese templo quedaron bajo los escombros, según confirmó el reverendo Thomas Pérez, quien pastoreaba a los feligreses.

Pero en el tercer día de las labores de rescate y remoción de escombros, bomberos encontraron la Bbiblia que era usada en los cultos y desde el púlpito de la iglesia.

Cinco feligreses de esa congregación murieron en las explosiones, según confirmó el reverendo Pérez, quien está interno en un hospital después de sentirse fuertes dolores en el pecho a causa de la conmoción que le produjo de las ruinas, secuela de la destrucción.

El ejemplar de la Biblia a gran tamaño, fue encontrado el sábado en la mañana por bomberos que excavaban. Para mayor sorpresa, la iglesia operaba en el sótano, el posible punto de origen del estallido y donde están las tuberías de gas que al parecer, provocaron las explosiones.

El libro sagrado, enchapado en negro, estrujado, pero con ambas cubiertas intactas y sus hojas también, estaba cubierto de polvo.

«Santa Biblia» se lee en español en la tapa del libro santo y en letras doradas que semejan oro.

Cuando los bomberos, mostraron la biblia, el reverendo Pérez de 83 años de edad, que estaba orando con un grupo de fieles, cerca de la escena, se conmocionó a tal nivel que sufrió los dolores en el pecho y tuvo que ser transportado en ambulancia al hospital Lennox Hill donde se recuperaba del percance.

«Nos sentimos muy orgullosos de haber rescatado la biblia para el reverendo Pérez», dijo el Comisionado de Bomberos Salvatore J. Cassano en una conferencia de prensa.

El pastor, ha estado guiando la iglesia durante 56 años y para él, la pena ha sido abrumadora por la destrucción del santuario y la muerte de los feligreses.

Varias de las ocho víctimas fatales, eran miembros de la congregación y además vivían en apartamentos de los edificios colapsados y cuyas viviendas estaban encima de la iglesia.

Fuente diariolibre.com