Cuando tenes esa pasión y seguridad los que están a tu alrededor dicen “¿a este que le paso? La loca de al lado ya no grita, canta ahora”. Cuando estas feliz y apasionada, tu entorno te ve diferente, los demás van a pensar que si vos pudiste ellos también pueden. Tenes esperanza en el porvenir y el que esta al lado tuyo se contagia. Cuando estas feliz entusiasmas a los demás y te dan una mano para que alcances tu sueño.

Cuando estas enfocada en una visión que viene de parte de Dios, apasionas a los demás y ahí empezas a ver el cumplimiento del sueño que Dios ha puesto en tu corazón.

Porque te has transformado en una persona llena de vida, que antes andaba así nomás y ahora se arregla, se ama, se cuida. Una persona que sabe que tiene propósitos sobre su vida.

Así estaba el pueblo de Israel, estaban felices porque se iban de la esclavitud de Egipto, entonces estaban llenos de felicidad, cuando vieron que las aguas se abrían y los enemigos se hundían hicieron fiesta porque vieron el poder de Dios sobre sus vidas.

Cuidate de los que te acompañan

Pero el populacho iba con ellos, eran extranjeros, no eran israelitas. Eran hombres y mujeres que aprovecharon que los israelitas se iban con los bienes de los egipcios y se fueron a buscar una nueva oportunidad. Esta gente estaba alrededor de los israelitas, estaban en el medio pero no tenían la misma relación ni dependencia de Dios como lo tenía el pueblo de Dios. Los israelitas los llevaron igual, hicieron juntos el camino. El populacho para nosotras representa a los extranjeros espiritualmente hablando que pueden ser:

  • Nuestra familia que no tienen la visión de Dios, que no tienen su espíritu en sintonía con el espíritu de Dios. Te dicen “Hace mucho frío, no vayas a la iglesia. Estas loca para irte con los chicos”. Algunas mujeres no pueden resistir la presión que les hace el entorno y toman decisiones que ellas no querían tomar. Porque son mujeres que todavía aún no son libres para poder elegir.
  • Nuestros amigos. Personas que conocemos desde hace mucho tiempo, que te dicen “nena deja de embromar, vamos a aquella que te tira las cartas y te va a decir la posta”. Tienen una visión que está totalmente opuesta a la visión de Dios, una visión diabólica que no te va a llevar a ningún lugar. Esas amistades pueden ser de la infancia, vecinos, amigos del trabajo, gente conocida que sigue estando a nuestro alrededor pero no comparten la misma visión.
  • Gente que está alrededor nuestro y no tiene ninguna influencia sin embargo, en determinados momentos comienzan a pesar sus opiniones. Te dicen “cuidado, me parece que estas exagerando no hace falta tanta oración”. “¿Segura que vas a estudiar a esta altura de la vida? Vos ya estas para tejer”. “Tené cuidado que en esa iglesia te quieren meter la mano en el bolsillo, te quieren robar”, “Me parece que tu negocio no va a funcionar”.
    El entorno influencia siempre, así como nosotros somos de influencia donde quiera que nos movemos, el entorno siempre nos va a estar influenciando. Nosotras tenemos que tener sabiduría para saber por quien nos vamos a dejar influenciar. Cuando una mujer tiene visión y sabe a donde quiere ir, nada la va a correr de su objetivo.
    En este pueblo los extranjeros se quejaron, como algún amigo que siempre lo hace. Finalmente te cansas de escucharlo quejarse o sino terminas quejándote junto con el que se queja, terminas contagiándote.

Así paso con éste pueblo, los que se empezaron a quejar de la comida, eran los extranjeros, pero el pueblo también empezó a llorar y reclamar porque se contagiaron de los otros. Porque no tenían seguridad interior.
La gente que le pasa esto, son personas que viven apegadas a las personas que no le ayudan. Y apegados no solo es influencia, sino que dependes del otro. Le consultan a extranjeros espirituales. A gente que no va a dar una palabra que venga de parte de Dios por más que tenga buenas intenciones.

El pueblo de Israel se quedo apegado a la opinión de los extranjeros. Cuando a una mujer le pasa esto pierden la posibilidad de alcanzar el sueño que Dios preparó para ellas o se les aleja el tiempo del cumplimiento.

En los otros pasajes, el pueblo se queja y al tiempo Moisés los envía a explorar a los lugares que tenían que habitar y vuelven con un informe negativo, solo dos hablan positivo. Los negativos tenían delante de ellos el sueño de entrar a la tierra prometida, pero por haberse alejado de la visión ellos no entraron al cumplimiento de su sueño.
El pueblo vio lo bueno pero resaltó lo negativo que vieron en ese lugar. Vos pensás que te va a ir bien, pero pensás en todo el esfuerzo que tenes que hacer. Te quedas a mitad de camino como los hombres negativos, pero los otros dos con toda su familia pudieron entrar. A causa de los demás, ese sueño que se podía concretar en días, tardo cuarenta años.

Como conquistar tu sueño sin oír a otros

Hay mujeres que alejan el cumplimiento de su sueño porque escuchan a personas que no deben, se siguen enganchando en la queja de todos los días, con el pesimismo.

Muchas veces decimos que lo vamos a lograr y a los días bajamos los brazos porque no nos animamos porque nos contagiamos de otros.

Nosotros escuchamos a otras personas porque nos apegamos a esos extranjeros que quieren venir a contagiarnos la manera de hacer las cosas.

Vos decidís empezar a hacer todo por derecha y aparece tu amiga que conoce a otro que te puede dar una mano para conseguir las cosas “rapidito”. Vos tenes que hacer todo agradando a Dios.

Esa gente tiene una visión diferente de la vida, porque nosotras no tenemos cualquier mirada sino que tenemos la mirada que Dios nos da para alcanzar los sueños de nuestro corazón.

Busca la guía de Dios

La gente se quejo delante de Moisés y él también antes se había quejado del pueblo rebelde. Pero hubo una diferencia, Moisés se quejó delante del Señor y le dijo que ya no soportaba más al pueblo. Es como decirle a Dios “vos me diste este sueño pero no hay puertas que se abran, ¿Cuándo se van a abrir?”. Las quejas delante de Dios son buenas porque son legítimas, porque abrís tu corazón delante del Señor.

El pueblo fue y se quejó delante de Moisés, no fueron a la fuente que podía traer solución para sus vidas. Tenes que fijarte con quien te quejas, tenes que presentarle queja al Señor. El pueblo se quejo entre ellos y no les dio resultado, quedaron después con la murmuración, sacando sus propias conclusiones. Los extranjeros estaban entre el pueblo buscando una oportunidad para ellos.

No te contagies de la queja, cambiala.

Vos podes ver que los extranjeros que están a tu alrededor son personas impacientes, que quieren todo ya, gente rebelde y quejosa. El pueblo ya se había quejado tanto que comenzaron a esparcir falsos rumores. Los que dieron el informe negativo fueron con la mentalidad de queja, negativa. Decían que iban a caer en sus manos y los iban a matar. Gente que escucho al que traía malas influencias y le fue mal porque no pudo alcanzar su sueño.

Los extranjeros no están felices ellos ni quieren ver felices a los demás. No les interesa que a vos te vaya bien.
A estos extranjeros no los tenes que correr, son personas que van a estar siempre cerca nuestro. No podes evitar que alguien pase al lado tuyo y se queje, pero vos si podes influenciar sobre esa persona y declararle palabra de fe. Cambia vos la atmósfera de ese lugar y no que esas personas tengan autoridad sobre tu vida.

El pueblo no lo pudo hacer, se contagio y se quedó en el desierto porque se dejo guiar por el pensamiento negativo de los extranjeros. Son personas que saben pero no hacen nada por alcanzar los sueños que Dios tiene para su vida. Es parte del pueblo que puede tener las cosas buenas que vienen de parte del Señor pero se miran a si mismos, miran lo que no tienen y ven cada vez mas lejano lo que pudieran llegar a tener tomados de la mano del Señor.

Son personas que dicen “yo ya no tengo los años, no tengo pasión”, ven todo negativo y se quejan.
Los grupos y las charlas en la iglesia tienen la finalidad de motivarte y de animarte a contar todo lo bueno que pasa en tu vida. Pero siempre aparece alguno que quiere hablar y orar por todo lo malo que le pasa en la vida. Vos venías con toda la polenta, te contagiabas de lo positivo de las demás y aparece una persona que te tira todo atrás. En el grupo si hay alguien que no está bien, no es el lugar para ayudarla porque sino de esa que estaba mal se contagian todas y se ponen mal. Hay que preparar los ambientes que producen bendición, tenemos que ser cuidadosas. Si hay alguna que está mal, le propones hablar en un momento a solas, no la dejas sola.

Tres tipos de personas:

  1. Los extranjeros que no te los podes sacar de encima pero podes elegir escucharlos o no.
  2. El pueblo que tiene visión, pero como no tiene unas cuantas cosas mas no puede entrar al cumplimiento del sueño.
  3. Josué y Caleb con toda su gente que aunque tuvieron que esperar un tiempo, entraron al sueño. Vos no vas a esperar mucho tiempo, tenes que creerlo.

Josué y Caleb tuvieron algo especial, tuvieron actitudes que marcaron la diferencia:

  • Cuando ellos dieron el informe dijeron: la tierra que recorrimos y exploramos es increíblemente buena. Si el Señor se agrada de nosotros nos hará entrar en ella y nos va a dar una tierra donde abundan la leche y la miel. Dijeron “nos va a dar”, todavía no la tenían, lo único que recibían eran mana y codornices. Pero ahora hablan de leche y de miel, hablan de sostén y abundancia. Dios tiene abundancias para tu vida, eso creían ellos de Dios.
  • Después le dijeron al pueblo que no se revelen contra el Señor. Otra de las cosas que ellos tenían era obediencia no solamente la tenían sino que también se la declararon al pueblo. Le dijeron que no se revelen. Como dice la palabra, aunque tu sueño pareciera que se retrasara, no abandones, porque lo que Dios te ha dicho que viene sobre tu vida, vendrá. Porque Dios es fiel y cumple con su palabra. No le estés preguntando a Dios con queja, pregúntale que mas tenes que aprender, que mas tenes que cambiar. Dios mira la actitud de tu corazón.
  • También tenían seguridad, dijeron “no se revelen contra el Señor ni tengan miedo de la gente que habita en esa tierra, ya son pan comido. Tenían seguridad de que aunque fuesen gigantes, aunque fueran personas poderosas, ellos sabían en qué Dios estaban confiando, estaban seguros y no en sus propias fuerzas sino confiados y seguros en el Dios que está sobre tu vida.

Si Dios te prometió algo, no pongas la confianza en tus propias estrategias porque te fallan, pone tu confianza en la guía del Señor. Tenes que estar atenta porque nunca sabes por donde va a venir tu bendición, no tengas miedo a esperar ni al paso del tiempo, no tengas miedo a las circunstancias que se te presentan.

Ellos dijeron “ya son pan comido, no tienen quien los proteja porque el Señor esta con nosotros”. No importa la circunstancia, el problema o el momento, vos tenes quien va delante de vos, vos tenes a Dios que te protege y si Él es por vos, quien contra vos.

Mensaje de la pastora Ana Castets – contacto: anacastets@yahoo.com.ar – www.LibrosCastets.com.ar