La vida está llena de aprendizaje, eventos buenos y malos que nos enseñan grandes lecciones y nos ayudan a formar nuestro carácter. Pero también hay obstáculos que nos impiden seguir aprendiendo.

¿Quieres vencer tus miedos y continuar aprendiendo?

Dios es nuestro maestro, quien con gran paciencia nos va enseñando y va entretejiendo situaciones en las cuales nos ayudará a formar nuestro carácter a su semejanza.

Moisés, cuando recibió de Jehová la instrucción de sacar a su pueblo de Egipto, no se creyó capaz de realizarlo, tuvo temor y se centró en su debilidad antes que el Poder de Dios:

“Entonces dijo Moisés a Jehová: ¡Ay, Señor! nunca he sido hombre de fácil palabra, ni antes, ni desde que tú hablas a tu siervo; porque soy tardo en el habla y torpe de lengua.” Éxodo 4:10 (RVR 1960)

Pero luego de expresar lo incapaz que se sentía, Jehová le respondió con una gran verdad:

… ¿Quién dio la boca al hombre? ¿o quién hizo al mudo y al sordo, al que ve y al ciego? ¿No soy yo Jehová? Ahora pues, ve, y yo estaré con tu boca, y te enseñaré lo que hayas de hablar. Éxodo 4:11-12 (RVR 1960)

No se trata de las capacidades que tengas para realizar una labor específica, sino de lo que Dios quiere hacer por medio de ti, enseñándote que con su respaldo podrás lograr  aquello que Él te llamó a hacer.

No desmayes porque no estás solo.

El aprendizaje nos enriquece y rendirnos ante nuestras limitaciones o temores no es la salida, al contrario, debemos enfrentarlos pero de la mano de Dios; confiando que nuestro Maestro no nos desamparará, que nos enseñará de cada situación el camino que debemos seguir hacia sus planes y propósitos, los cuales son buenos.

Hubiera yo desmayado, si no creyese que veré la bondad de Jehová En la tierra de los vivientes. Salmos 27:13 (RVR1960)

Aprendamos a depender de nuestro gran Maestro a cada paso que damos, pues eso nos acerca más a Él y nos permite conocerlo íntimamente.

 CVCLAVOZ.