Un plan enfocado a la lectura de la Biblia en todas las escuelas públicas y privadas de Guatemala es impulsado por un congresista cristiano. La iniciativa tiene el respaldo de la Alianza Evangélica y la Iglesia Católica.

La Constitución Política de Guatemala tiene 30 años de promulgada, y en su artículo 73 estipula que «el Estado contribuirá al sostenimiento de la enseñanza religiosa sin discriminación alguna«.

Es por eso que el congresista Marvin Osorio, impulsa una propuesta de ley para llevar la lectura de la Biblia a cada una de las escuelas de Guatemala.

«Hasta el día de hoy, ningún ministro de educación ha comprado una sola Biblia. Y lo que se quiere ahorita es que se lea la Palabra. Vea los grandes problemas que tenemos en nuestro país. Hay inseguridad, tantas maras que hay, han sacado a Dios realmente del Estado y queremos impulsar que Dios permanezca en el Estado», dice Osorio.

La propuesta provocó posiciones encontradas en las redes sociales. Muchos criticaron la iniciativa, pues indican que contraviene la Constitución Política y el establecimiento del Estado laico.

El texto establece como una obligación de los centros educativos privados escoger una versión de la Biblia que se ajuste a sus enseñanzas y asignarla dentro del centro de estudios. En el caso de las escuelas públicas, la versión bíblica será asignada por el Ministerio de Educación.

Para la educadora Esther González, en la actualidad los menores necesitan valores debido a la falta de atención de sus padres.

«Los padres no les dedican tiempo, no están con ellos ni les dicen cual es lo bueno, ni cual es lo malo. Y eso es lo que ha hecho daño a los jóvenes, porque no tienen los principios y se mantienen en la calle», indica González.

Gonzalez señala que la mayoría de padres se muestran a favor de la lectura bíblica en las escuelas.

El proyecto de ley será presentado en el Congreso el próximo 15 de julio. Sus promotores esperan que la propuesta se aprobada con carácter de urgencia, por lo que serán necesarios al menos 105 votos a favor.

Fuente: Mundo Cristiano