Millones de espectadores alrededor del mundo verán la pelea previa al combate Pacquiao-Mayweather. Será una gran oportunidad para el boricua Gammy Rodríguez, “Campeón de Cristo” por sobre todas las cosas.

“Yo estoy contigo en esta pelea”. El boxeador boricua categoría pluma Gamalier Rodríguez recibió de parte de Dios estas palabras cuando fue convocado para ser ´carne de cañón´ frente al filipino Alan Tanada en 2012. “Esa pelea me abrió el camino para mejores oportunidades”, afirma Gammy, quien derrotó a Tanada luciendo la inscripción “Filipenses 4:13” en su pantalón.

Este gran deportista cristiano no ha perdido un combate en los últimos seis (6) años, lleva 17 victorias consecutivas e irá a la oportunidad de su vida el próximo 2 de mayo en Las Vegas, cuando se enfrente al campeón mundial y doble medallista de oro olímpico, Vasyl Lomachenko, previo al combate Pacquiao-Mayweather.

Sin duda, se trata del mayor acontecimiento del boxeo para Puerto Rico, desde Tito Trinidad y Oscar De La Hoya. “El Señor me dijo tiempo atrás que la puerta que tiene para mí es grande”, afirma con fe y confianza plena el boxeador cuyo actual entenador es Tito Tiburón Ocasio, pastor evangélico y coach de boxeadores, propietario del gimnasio “John 3:16”, en Ocala, Florida.

Bendición tras Bendición

Gamalier Rodrígues afirma que muchas veces fue humillado. “Pero siempre el Señor me confirmó que estaba conmigo”, dice.

Cuando lo convocaron a pelear contra el mexicano Alicio Castañeda, estampó en su cinturón la leyenda “Campeón de Cristo”. “El Señor me bendijo y me dio la victoria, aunque había sido corto el tiempo que me dieron para prepararme. Suponían que perdería, pero gané el Campeonato NABO de la Organización Mundial de Boxeo”. Luego defendió en dos ocasiones este título que aun ostenta.
A finales de 2013, poco tiempo después de haberse casado, se enfrentó con Orlando Cruz y ganó. “Llevaba mi cinto Juan 3:16 y fui humillado por la prensa por servir a Cristo, pero mi carrera ha sido bendición tras bendición porque Dios está conmigo”, dice.

Fue justamente en esa pelea que Gammy conoció a Tito Ocasio, y después pasó tres meses en su casa, en Ocala, entrenando en su gimnasio. “La victoria de Gamalier detuvo el circo que se iba a armar de parte de los gays si ganaba Orlando Cruz, declarado públicamente homosexual”, comenta el entrenador.

Dos Guerreros

Ocasio, que también fue boxeador y estuvo envuelto en la pandilla de los Latin King, se relacionó con Gamalier primeramente por medio de Facebook, a raíz de que los dos son de Bayamón, y luego de conocerse personalmente pasó a formar parte de su equipo de trabajo.

“He venido a Puerto Rico por dos meses y medio, para entrenarlo, ya que Gammy acaba de ser padre y su bebé sigue un tratamiento médico que sería difícil continuar en otro lugar. Lo considero un viaje misionero», sostiene Tito Tiburón. “Estuve orando sobre esta posibilidad y mi esposa me confirmó que debía ayudarlo. Gamalier sirve a Dios y por eso he venido”, añade.

El entrenador y pastor afirma que “Dios abre puertas pero hay que entrar por ellas, yo estoy seguro de que él va a ser el campeón mundial y será para la gloria de Dios”. Ambos se quedarán en la Isla hasta el momento de viajar a Las Vegas para la pelea. “Y cuando gane, vendré con él para acompañarlo en el recibimiento que le harán en el aeropuerto”, asegura Ocasio.

La entrevista transcurre en “Vos sabés”, un restaurante argentino situado junto a La Estrella del Norte, muy cerca de donde nació y creció el gran Gamalier Rodríguez. “Soy el noveno de doce hermanos y vivíamos en la barriada La Cambija. Desde muy chico me gustó el boxeo y mi primera pelea amateur fue a los 10 años” comenta.

David y Goliat

“Dos cristianos llevándonos a la cartelera más grande del boxeo, no es casualidad. Vamos a dar testimonio ante millones de personas”, dice con entusiasmo el periodista deportivo David Colon, quien también participa en esta charla que tiene lugar luego de que el boxeador y entrenador compartieron sus testimonios con los muchachos del centro Teen Challenge de Bayamón.

La dieta del boxeador indica para esa noche “pasta”, y Gammy disfruta su plato de penne con salsa Alfredo. Sobre la mesa descansa el cinto que ha lucido en varios combates (con la leyenda “Juan 3:16” a un lado y “Campeón de Cristo” del otro); el mismo que usará en el MGM Grand de Las Vegas, evento que se espera que supere los récords de audiencia por la importancia que reviste el combate de los más grandes de la historia. Y Gamalier Rodríguez, nuestro Gammy, estará allí, cual David frente a Goliat, para arrebatarle el título mundial a Lomachenko.

Escrito por: Verónica Rossato, Teen Challenge de Puerto Rico, Inc.