El caso del jugador de la selección brasileña, Cristiano Ronaldo, podría haber sido distinta, una de tantas historias donde se termina con la vida de un hijo, pero hoy su mamá agradece a Dios por haber tomado la desición correcta.
Con lágrimas en los ojos, pero mucha alegría en el corazón, la madre del jugador, María Dolores de los Santos Aveiro – hoy con 63 años – cuenta que desistió de abortar a su hijo y hoy se empeña en mostrar a las madres que se sienten desamparadas, que hay otras opciones mejores que el aborto en muchos casos.
María se encuentra en São Paulo, donde está a punto de lanzar su biografía, con el libro “Madre Coraje”.
Su historia también fue muy fuerte. Siendo huérfana de madre a los seis años, María fue abandonada por el padre enseguida y acabó siendo criada en un orfanato de sistema riguroso.
En su adultez, se casó con José Dinis Alveiro, tuvo tres hijos y vio a su marido ser llamado a la prisa para una guerra en Angola. Cuando regresó, él se había transformado en otro hombre, estaba entregado al alcoholismo y era muy violento.
A los 29 años, recibió la noticia que estaba embarazada del cuarto hijo y fue en ese momento cuando pensó en abortar, pues creía que no soportaría criar a otro niño en medio de aquella crisis en el matrimonio. Pero el médico le aconsejó no hacerlo, pues era muy joven y necesitaba pensar mejor antes de tomar una decisión tan apresurada.
“En ese momento yo tenía tres hijos y muchas dificultades, de los 29 a los 30 años quedé embarazada por cuarta vez y por supuesto que estaba muy afligida, entonces decidí abortar, ese hijo era Ronaldo, tomé muchos té, pero no lo conseguí. “El médico me miró y dijo:” No, eres muy joven, ese hijo que tienes ahí te va a dar mucha alegría “, recuerda María.
“Fui a casa muy triste, nunca imaginé que ese bebé era la persona en la que se convirtió hoy, por supuesto comprendó de que aquel hijo me lo dió Dios y debía recibirlo”, señaló.
Ella explica que hoy quiere compartir su testimonio como una herramienta de aliento a las madres para entender que hay otra salida, además del aborto.
“Ahora quiero transmitir a todas las mujeres que están embarazadas, con dificultades como yo pasé, para luchar, no cruzar los brazos, porque nadie sabe la alegría que ese hijo nos va a dar”, finalizó.
Fuente Guíame
Robert Lora
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