Las cucarachas son insectos de cuerpo color marrón y ovalado, tienen una cabeza pequeña con antenas filiformes, patas largas aplanadas y espinosas, y pueden medir de 3 a 7,5 cm.

Estos bichos viven en una amplia diversidad de ambientes ya que se adaptan con mucha facilidad, pero normalmente se los encuentra en lugares cálidos y oscuros, donde la hembra puede colocar hasta 20.000 huevos convirtiéndose rápidamente en una plaga.

Una curiosidad en torno a este insecto es que tienen una resistencia superior a la radiación nuclear en comparación con otros seres vivos.

La razón es que la radiación actúa principalmente sobre las células del cuerpo que forman los órganos, los tejidos, los músculos y la piel. En humanos la división celular es constante, pero en cucarachas sólo una vez por semana ya que tienen un organismo muy simple, de modo que es más difícil que se vean afectadas por alguna emanación nuclear.

En caso de que este insecto se haya convertido en una plaga, lo más recomendable es llamar a un especialista para que se ocupe de exterminarlos, pero si se trata de una invasión menor, se pueden eliminar sólo con un insecticida. Las recomendaciones posteriores son: mantener el lugar limpio, no dejar comida a la intemperie, cubrir los huecos en la pared y evitar la acumulación de papel o cartón en depósitos.

Sabemos que la limpieza exterior es importante, pero la Palabra de Dios también habla del interior.

“Así que, si alguno se limpia de estas cosas, será instrumento para honra, santificado, útil al Señor, y dispuesto para toda buena obra.” 2 Timoteo 2:21 Versión Reina-Valera 1960

La Biblia habla de limpieza espiritual porque a Dios le interesa mucho la santidad de sus hijos, pero también hay un énfasis en mantener limpia la mente. Mateo 5:21-30, dice que odiar a alguien es como haberlo asesinado y codiciar a una mujer es como haber adulterado con ella.

Esto se debe a que los pensamientos son la forma en la que se inician las acciones y Dios se enfoca en atacar el problema de raíz cortando cualquier motivo de pecado. Sin embargo, existen pensamientos que son difíciles de superar igual que algunas cucarachas o plagas.

Muchas veces es un recuerdo de alguien muy querido que ya no está, el dolor por un suceso traumático, palabras hirientes que hacen eco en el interior, pornografía consumida, odio o resentimiento, etc. En realidad existe una lista interminable de pensamientos que podrían desembocar en un pecado.

La Biblia dice que Dios conoce la mente y el corazón del hombre, por lo tanto Él se convierte en el especialista para ayudarnos a eliminar esa plaga que parece que no quiere irse de la mente con nada.

Salmos 139:2 dice: “Tú conoces todas mis acciones; aun de lejos te das cuenta de lo que pienso.” Versión Dios Habla Hoy.

Así como ocurre con un experto en control de plagas, a quien un cliente puede llamar y hablarle con franqueza sobre el problema que tiene, de la misma manera podemos conversar con Dios para que nos ayude a superar cualquier pensamiento que esté ensuciando y causándole daño nuestra vida.

No esperes más, Él está a la distancia de una sola frase: ¡Señor, ayúdame! 

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