Hablar de sumisión pastoral es muy cuestionado en muchas denominaciones, la mayoría de las veces enseñan que los miembros no deberían cuestionar a sus pastores ni tocar al ungido del Señor.

No obstante, el reconocido teólogo bautista John Piper destaca que existe una restricción para el sometimiento a la autoridad del pastor sobre la iglesia. Resalta que esto no es una caracterización correcta de la enseñanza bíblica y que los líderes terrenales tienen que estar inmersos a la Biblia.

Piper considera que existen muchos pasajes bíblicos que muestran el verdadero significado de esta sumisión a las autoridades, predominando lo que dice la palabra en Hebreos 13:17: “Obedeced a vuestros pastores, y sujetad a ellos”. Simultáneamente, el teólogo remarca que

“El pastor no hace la función de Dios. Ningún pastor de cualquier iglesia es Dios. Una vez que ellos no son eficaces, su autoridad no es incondicional. Por lo tanto, esa sumisión y obediencia a ellos no es terminante “.

Piper trae a la memoria que en todo el Nuevo Testamento existen las verdaderas enseñanzas acerca de la sumisión, ya sea al gobierno secular, a los esposos, a los padres o a los pastores. Pero la autoridad absoluta de Jesús esta por encima de todas las mencionadas.

También él remarca que existen suposiciones de que hombres que poseen el título de pastor (o líder) deben predicar lo que verdaderamente nos enseña la palabra de Dios, la doctrina bíblica no es del hombre.

La esperanza de que su pastor proceda siempre conforme a la Palabra de Dios, esto será fructuoso para la relación entre “oveja” y “pastor”. “Nosotros amamos cuando la gente anuncia la verdad de Dios, no la nuestra”, afirma.

Al unísono, Piper enseña, el líder que muestra en su conducta una total sumisión a la Palabra de Dios despertará la confianza en su congregación.

“Cuando les pido que sean obedientes y sumisos a sus pastores, se necesita de que ustedes también estén sumidos a la Biblia. Estos líderes deberían tener la Biblia como parámetro de enseñanza en todo momento “, destacó.

Concluyó diciendo que cuando el líder o pastor lo demuestra, la congregación podrá decir:

“Yo amo a ese hombre porque él es sumiso a la Biblia.

Estoy listo para seguirlo a cualquier lugar.”

Fuente: Gospel Geral